Los puntos suspensivos

Se usan para indicar, en un escrito, la suspensión de una palabra o de una idea. Generalmente cuando se da por entendido lo que viene en seguida.

Los ejemplos más comunes se dan en los siguientes casos:

Dejar flotando una idea negativa sobre algo o alguien:

Sobre su profesión... mejor es quedarse callado.

Dejar frases incompletas:

Y se fue el invierno...

Dar un toque de suspenso y emoción al final:

Todo quedó en silencio... un silencio sepulcral.